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El poder del mindfulness para tratar el TDAH

  • Laia Pérez Ríos
  • 27 mar 2024
  • 2 Min. de lectura

Cada vez son más las personas diagnosticadas con TDAH pero poco se habla del poder del mindfulness y sus beneficios para tratar este trastorno.


No lo digo yo, lo dice la neurociencia y, si no me crees, compruébalo tú mismo. Es más, te reto a que lo hagas. El mindfulness es una herramienta eficaz y sencilla para tratar diferentes tipos enfermedades como la ansiedad, la depresión y también otro tipo de trastornos, como el conocido TDAH, Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad.


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Este trastorno se caracteriza por dificultades en mantener la atención y impulsividad y puede presentar desafíos realmente significativos en la vida diaria y profesional de quienes lo experimentan.



Pero a ver... ¿y qué tiene que ver todo eso con mindfulness?



¡Pues aunque no lo creas tiene mucho que ver y presenta múltiples beneficios! Entre ellos, mejora la concentración ya que mindfulness enseña a centrar la atención de manera intencionada, mejorando la capacidad de enfocarse en el trabajo y en estudios.



También ayuda a regular las emociones. La impulsividad emocional es un aspecto común del TDAH ( y también de personas con altos niveles de ansiedad) que puede complicar las relaciones interpersonales e intrapersonales.


Gracias al mindfulness, las personas aprenden a observar sus emociones sin reacción inmediata y sin juicio, permitiendo respuestas mucho más adaptativas.


El mindfulness disminuye la ansiedad y con ello ayuda a regular los niveles de cortisol, dopamina y serotonina en nuestro organismo, lo que propicia un estado de calma y serenidad interior.


A su vez, el mindfulness promueve el autoconocimiento ya que es un ejercicio de introspección. Dedicar tiempo a la reflexión consciente beneficia a las personas con TDAH a comprender mejor sus patrones de pensamiento y comportamiento, lo que es crucial para el manejo efectivo del trastorno.


Te reto a que en el día de hoy, y en estos días de fiesta, dediques tan solo 2 minutos (¡solo te pido 2 minutos de tu tiempo!) a centrarte en el momento presente.


Sé que no tendrás ganas, tendrás cosas mejores que hacer (mirar el móvil probablemente sea una de ellas) y no sabrás cómo empezar pero si sigues estos sencillos pasos, estoy segura de que me lo agradecerás.


Cómo practicar mindfulness en 4 sencillos pasos


  1. Siéntate en un lugar tranquilo.

  2. Cierra los ojos.

  3. Concéntrate en tu respiración por dos minutos.

  4. Si tu mente divaga (que lo hará), regresa amablemente a tu respiración.



Escríbeme contándome tu experiencia. Te aseguro que no te arrepentirás. 🧘‍♀️



 
 
 

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© 2025 by Laia Pérez Ríos, Ex-tresada.

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